Si bien la mayoría de las personas con cáncer de mama son mujeres, alrededor del 1% son hombres. Y aunque las personas blancas no hispanas tienen tasas más altas de cáncer de mama, las afroamericanas y las negras tienen tasas más altas de mortalidad por cáncer de mama.
Muchos factores controlados por la genética, incluida la raza, el origen étnico y el sexo, pueden afectar la forma en que las personas responden a un medicamento. Por eso es tan importante que los estudios clínicos incluyan a personas de todos los orígenes.
Elegir participar es muy personal y muchos factores pueden influir en su toma de decisión. Históricamente, ha habido prácticas injustas en la investigación clínica y barreras de acceso que han obstaculizado la participación inclusiva. Hoy en día, existen muchas protecciones para salvaguardar mejor los derechos y la seguridad de los participantes y garantizar que los estudios clínicos se realicen de manera ética.
Si decide participar, debe dar su consentimiento (permiso) antes de inscribirse en un estudio y puede decidir retirarse del estudio en cualquier momento y por cualquier motivo.
Su participación en un estudio clínico podría contribuir al avance de posibles medicamentos en investigación para personas de todo el mundo. Cuando todos estén representados con precisión, podremos mejorar el desarrollo de medicamentos de estudio innovadores, aprender cómo funcionan para diferentes personas y reducir las disparidades de salud entre las poblaciones subrepresentadas.